Entradas

junio 2020

estoy tan hecha y deshecha que ya ni siquiera sirven las palabras ¿que escribo? ¿que puedo escribir? si la realidad me pasa por encima la vida me da vueltas tengo un caldo neuronal y una olla a presión por cabeza no hay lagrima que desahogue ni suspiros desesperados soy una con mis miedos soy una con el todo soy dos con la nada y si de algo sirviera esto mis paredes serían de papel y mis uñas de grafito pero ¿de qué me sirve escribir? si es finito, como todo susceptible a mis críticas al frío que me aprieta la tráquea

sin título

Las oraciones recorren mi mente como si fueran a poder fijarse en algún lado, como si tuvieran alguna utilidad más que crear un horizonte romántico para enterrar en él mi vida. No debería querer adornar tanto las cosas, al final no hay más que electricidad moviéndose por todo mi cuerpo de forma desquiciada, sin rumbo. Quisiera creer que puedo adornar un poco las cosas, que esto no está doliendo en vano. Quisiera creer que no estoy, simplemente, escribiendo oraciones desconectadas entre sí, tratando de encontrarles algún sentido o conexión.  Pienso las palabras pero no las escribo, como un mensaje pendiente que hace años tengo que abrir y por miedo no lo hago. Como algo protegiéndome de mi propia vida. Como una olla a presión que por momentos se desborda pero nunca explota. Me pregunto, sin embargo, si la explosión podrá llegar a terminar de desordenarme la existencia. Todo, al final, siempre está bien, y temo por el día en el que no lo esté: un día la pastilla se va a desfigurar, para

El irrevocable camino que tomaron las cosas

 Algo se apagó en algún momento, quizás cuando ese papel tocó tu lengua y cerraste la carta. Hasta ahora, todavía no la abro. Hay fotos por todos lados, y unas luces que funcionan a medias. Hay bebidas blancas a las que se les evaporó el alcohol. Hay una calle que no piso hace mucho. Está por ahí, tirado, el mapa del irrevocable camino que tomaron las cosas. Las flechas luminosas que llevaron todo hacia donde tenía que ir, hacia donde yo quise que fuera. En realidad no me arrepiento. Sin embargo, todavía siento ese regusto en la garganta, algo muy amargo que me entumece la lengua. Después, el inevitable dulzor me hace sentir que todavía estoy viva. Cuando me despierto, he vuelto a morir. ¿Por qué la vida no puede ser siempre así de fácil? Es propio de nosotros querer volver el tiempo atrás. Es propio de mí sostener nostalgias insostenibles. Era propia de vos una verdad que, por dentro, detestaba.

vodka con jugo

no te voy a decir que voy a cargar el celular sólo para prenderlo en medio de la fiesta en medio del alcohol y escribirte algo y después borrarlo no te voy a decir que entre la gente bailando cada tanto miro alrededor con un vaso lleno en la mano esperando que aparezcas a robarme un poco de alcohol no te voy a decir que hago mapas mentales de todo lo que sos de tus labios sobre los míos no te voy a decir cuántos sobres de jugo tengo a medio terminar en los rincones de mi cuarto no te voy a decir que te escribí esto porque no lo entenderías y seguramente te reirías de mis versos ebrios de que siento algo no te voy a decir que quiero algo más que lo físico y que te dedicaría alguna que otra canción de amor y la haría nuestra para escucharla cuando no estés no te voy a decir que soy fría me duele querer me angustia tratar y que tengo miedo porque desde que llegaste me estoy derritiendo y con cada noche y cada trago y cada beso me derrito u

diecisiete

¿somos? ¿estamos? si cuando estamos no somos y cuando somos no queremos estar si todo se reduce a la posibilidad de morirnos para encontrarnos y sentirnos vivos si te veo desde la distancia y te encuentro buscándome me buscas encontrándote te busco encontrándome me encuentro buscándote pero prestándote más atención alcanzo a sentir en mis labios el roce de los tuyos contorneándose burlones aún estando a metros percibo tu sonrisa socarrona como un fino y frío bisturí rasguñando mis heridas y clavándose bien en el fondo de mis diecisiete años abro los ojos y estoy otra vez en medio de la cocina desmayándome en vos derramándote mi sangre vertiendo los restos de mi conciencia sobre tu campera de algodón abro los ojos y sigo asesinando sola a mis neuronas mirándote presagiosa y aturdida tratando de que me prestes atención y sientas en tus labios el roce de los míos contorneándose malvados para que aún estando a centímetros percibas mi desinterés com

humor vítreo

las cosas buenas llegan: vienen cruzando desde la otra vereda, las siento en el calor de una tez ártica, suben helándome la nariz, se asoman por unos ojos cristalinos, empañan mi ventana a la madrugada, enrojecen mis pómulos y desatan los puños de mi campera. y las telas vuelan sobre mi cara sólo para esconder verdades obvias, protegerme de los juicios amigos y arremangar mis pestañas, mi fascinación por toda su cultura y lo terrible que esconde. las cosas buenas llegan: vienen en forma de temporal, rebalsan las canaletas, se meten por la ventana a la madrugada. son tan brillantes que queman la madera del techo y forman goteras, gotean sobre mi almohada y cuando duermo siento las lágrimas, ¿habré calcado otra vez el film? pero abro los ojos y es luz, todo es luz. y no puedo esperar a perderme para ver en dónde caigo esta vez: si en retazos morados o en estampados minimalistas, porque los seres que quiero son especiales. sólo velo por ese enfoque inmis

mayo

miedo miedo al miedo miedo al antónimo del miedo miedo a lo negativo porque existe miedo a lo positivo porque se irá miedo a arriesgarme miedo a no intentar miedo a no llegar miedo a ir demasiado lejos miedo constante y profundo manejando mis palabras momificando mis deseos moldeando mis sentimientos marcándome los labios metiéndome bien adentro me voy muriendo metamorfosis? no hay me hace parecer metal frío más soy todo menos eso moldeable, manipulable, tal vez mantas no me ocultan del todo mientras miro por el rabillo del ojo mantras resonando a la distancia meticulosa en mi represión mareada, sin embargo, mejora la perspectiva mis miedos no son monstruos muy simple desentenderme de ellos mil excusas, mil lamentos mido las emociones muestro menos de lo que debería muestra de que me formaron los demás meramente deformándome el autoestima miento momentáneamente pero ¿miraré fijo cuando llegue el momento? ron y hielo, estómago: misceláneo matutino